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domingo, 4 de noviembre de 2018

EL CURA DE CUDILLERO "LOS" LLEVA DE SOMBRERO

EL CURA DE CUDILLERO

Pues al cura de Villalpando se los llevaban cuatro bueyes e iban sudando. Al cura de Argamasilla se los toca el monago con la campanilla y los del cura de Cudillero le sirven al sacristán de sombrero. Íbamos a dar tierra a mi cuñada Elena y yo presa de dolor por Elenita la desgraciada que ha muerto ciega y desvalida en un geriátrico de Muros recé un responso, el que sabía de cuando asistía a los funerales en mis tiempos mozos, una forma de rezar cantada porque el que canta reza dos veces y en el cementerio de San Fortunato escuchose mi voz potente y desgarrada en un kadish  o secuencia de la vieja misa de difuntos de difuntos que ha debido de sonar durante muchos siglos en este bello camposanto junto a la marina. El cura me prohibió que pronunciase aquel rezo en latín pero no hice caso. Estos clérigos no creen en Jesucristo, colegí y les importa un rábano el dolor de sus feligreses. Lo utilizan para servirse a sí mismo en su afán de control y de poder, actitud misionera. De regreso a casa después del entierro le dije a mi mujer: "mira, cielo: estos tíos predican la caridad pero no la practican nunca, son soberbios, orgullosos, taimados e inhumanos. Sin embargo, creo que tu hermana desde el cielo premiará mi gesto de gallardía y de respeto a la tradición". Faltó un adame  que no llamé cojonazos al cura de los pixuetos aunque mi me parece que quedó confundido. Sí que lo es. Los felpeyos de esta clerigalla adusta y antipática que los ponga de sombrero. Siempre se lo tuvieron muy creído. No jugarán con mi fe y mis sentimientos religiosos a pares y nones. REQUIEM AETERNAM DONA EIS DOMINE ET LUX PERPETUA LUCEAT EIS. TE DECET, DOMINUS DEUS IN SION ET TIBI REDDETUR VOTUM IN JERUSALEM. EXAUDI ORATIONEM MEAM AT OMNIS CARO VENIAT. TODA LA CARN VENDRÁ A TI SEREMOS REDUCIDOS A POLVO