PASSOLINI PROFETA Y
MÁRTIR
TUVE un bloqueo. Es esa “pájara” del escritor que te impide
pedalear cuando montas sobre las teclas del ordenador. Y de la impase vino a
sacarme el recuerdo de aquellas películas de Pier Polo Passolini que veía yo en
una sala de cine de arte y ensayo de Fulham Road. Son recuerdos de los días de vino y rosas.
Nunca fui más libre y feliz que en aquellos días londinenses
de mi juventud que añoro ahora en la vejez. Pues bien, aquellos filmes de este
impresionante creador italiano “Bocaccio”,
“Canterbury Tales” “La pasión según san Mateo” me llenaron de ilusión por
la vida, la edad media y la espiritualidad con que retrata a Cristo el autor
italiano. Nadie nos ha contado de forma tan expresiva cómo fueron aquellos
siglos previos al renacimiento: la romerías, las predicas de algún dominico
furibundo, los engaños y triquiñuelas de lupanar (aquel pobre maracucho siciliano,
ben zapato, buena media, buena bolsa con dinero, las monedas le tintinean en la
bragueta, representado por un marroquí cuya noche de amor en la cual soñaba después
de haber conocido a una “princesa” termina sumido en una privada con perdón
esto es la mierda de un retrete, o la venganza de aquellos dos mozos que por
venga la violación de su hermana le cortan la cabeza al amante al amador y la
entierran en un tiesto. El tiesto al cabo del tiempo florece. Así como otras
muchas aventuras de matiz picaresco o místico religioso que demuestra cómo era
la vida en los conventos.
No perdamos de vista a aquel hortelano que se hace pasar por
mudo y al cual dos hermanitas ardientes y faltas de sexo introducen en una
cabaña en medio de la huerta.
No sabían que desde los altos del atrio las estaban viendo el
trajín toda la comunidad en pleno asomadas las monjitas a las ventanas e
incluso la madre abadesa lleva al hortelanito al huerto pero he aquí que el
mudo ante tanto trabajo exclama no puedo más y las otras que contemplaban la
escena al sentir al mudo hablar exclaman lo de milagro… milagro. Magnifico cuento
de Bocaccio.
El gran escritor italiano, cineasta y poeta por esta y otras
muchas razones como era su homosexualidad fue blanco de los odios de la curia. Se
dice que su asesinato fue una trampa que le tendieron los del Vaticano proporcionándole
un encuentro con un efebo que lo asesino.
Passolini siempre se declaró amigo de la paz, de la no
violencia. Toda su obra es un canto al amor y una crítica a la hipocresía, la
incultura, la testarudez de una sociedad que vive en tiempos convulsos.
Ha caído en mis manos
un libro suyo “Escritos corsarios”
que traen a mi memoria los tiempos de juventud de Londres. Son un grito a favor
de la tolerancia, el perdón, la compasión, una condena del fascismo que es la
serpiente de siete cabezas que muda de piel para perpetuarse en el poder y
parece estar vigente medio siglo después de la muerte de Paolo que fue mártir y
profeta. Lo mataron los curas utilizando la mano asesina de la democracia
cristiana.
San Piero Paolo Passolini, que estarás en los cielos, ora pro
nobis
martes, 2 de julio de 2024